BERLIN.- El "Taz", un periódico izquierdista alemán en constante crisis de supervivencia, ha emprendido una campaña en la que "castiga" a sus lectores por no suscribirse con noticias sin titulares, sin zetas y con fotos de desnudos.
La imagen de una mujer de pechos vacunos al desnudo sorprendió en su edición de este fin de semana, acompañada de titulares escandalosos que superaban a los de los diarios sensacionalistas de gran tirada.
Los periodistas pretendían realizar una nueva llamada de atención sobre los problemas financieros del periódico, que se convirtió por un día en todo lo contrario de lo que pretende ser, para advertir a los lectores de lo que se pueden perder si no se suscriben.
El "Tageszeitung", al que todos llaman "Taz", nació como el gran proyecto "alternativo" del movimiento anti-autoritario de los años 60, que no se veía representado por la "prensa burguesa". Desde entonces, la voz de izquierdistas, ecologistas, feministas y pacifistas se ha caracterizado por la crítica irónica y por campañas insólitas como la recaudación de fondos para sufragar la guerrilla de El Salvador.
La prácticamente inexistente publicidad en sus páginas, el reducido grupo de lectores potenciales del diario y el hecho claro de que el "Taz" se centra en temas muy concretos y aquel que quiera estar bien informado debe comprarse otro periódico, son algunas de de las razones de que la quiebra persiga a sus editores. Y es que el rechazo al capitalismo que impera en la prensa es una buena toma de postura que no da de comer.
A estos problemas, se suma el desencanto de sus seguidores ante el giro hacia la Tercera Vía que ha dado el periódico que, para mayor deshonra, ha pasado a convertirse en el "órgano oficial" del Partido Verde en el Gobierno.
El grito por la supervivencia del "Tageszeitung" llegó al do de pecho en 1995, cuando los empleados decidieron dejar en blanco la portada. Ahora, se dedican a amenazar a los alemanes con publicar todos sábados ediciones absolutamente contrarias a su línea habitual si antes de cada viernes no llegan el número de suscripciones exigidas.
Y como las "intimidaciones" nunca surten el efecto deseado, los castigos han elevado el tono hasta la auténtica flagelación con un número dedicado íntegramente a la rancia nobleza y a las casa reales, y otro en el que las zetas quedaron prohibidas. En un idioma como el alemán, leer esta edición del "Tag" exige un auténtico ejercicio de ingenio adivinatorio.
El "Taz" de este fin de semana se decantó por la carnaza más descarada, con páginas inundadas de fotos pornográficas, de políticos con gestos comprometedores y titulares tan absurdos como "la colita late a la izquierda", un guiño al libro del dimitido ministro de Finanzas Oskar Lafontaine ("El corazón late a la izquierda").
La campaña, que se ha convertido en un juego entre el periódico "alternativo" y sus lectores, continúa y para la próxima semana los redactores amenazan con guardar las cámaras fotográficas en sus cajones y coger papel y lápiz para ilustrar con "dibujitos" sus noticias.
EFE Publicada el 2 de diciembre de 1999
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