BERLIN.- Dicen que muchos se suben al carro del poder con la ambición de sumar ceros y ceros a sus cuentas corrientes. Ese no es el caso del canciller alemán, Gerhard Schroeder, que podría hacerse millonario gracias a su incipiente carrera como cantante y no por ser uno de los dirigentes más importantes de la UE.
Schroeder podría recaudar hasta un millón y medio de marcos (150 millones de pesetas) gracias a un superventas titulado «Tráeme una cerveza o entro en huelga», del que es compositor e intérprete. A pesar de que no hizo otra cosa que pronunciar esa frase en un acto de firma de autógrafos, se estima que esa es la cantidad que le corresponde en concepto de derechos de autor y cantante por un 'single' del que se han vendido 360.000 ejemplares.
Ese es el cálculo que ha hecho el popular periódico 'Bild am Sonntag' respecto a las ganancias en potencia derivadas del peculiar éxito discográfico con 'voz' y 'texto' jefe del Gobierno alemán.
El artífice de la hazaña no es en realidad Schroeder, sino un popular cantante y presentador de televisión, Stefan Raab, especialista en triturar frases de personajes para poner en evidencia sus 'pifias' públicas.
Raab pasó lo de «Tráeme una cerveza o entro en huelga» por su mesa de mezclas, le puso música y lo difundió primero a través de Internet y luego en forma de disco y en tres versiones: polka, 'funky mix' e instrumental.
El irónico Raab ha ofrecido al canciller la posibilidad de participar en los beneficios de un éxito que ocupa el segundo lugar en el 'hit parade' alemán, sólo aventajado por el 'Spirit of the Hawk', de Rednex, y varios puestos por encima de la estrella de los más jóvenes, Britney Spears.
Eso sí, para hacerse con esa suma millonaria, el canciller deberá ingresar primero como 'autor' e 'intérprete' en la Sociedad de Derechos Discográficos (GEMA).
EFE Publicada el Jueves 26 de octubre de 1999
0 comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por tu participación